En la costa y en las regiones inferiores del Atlas Telliano abunda la vegetación mediterránea. Los bosques han sido sustituidos por arbustos debido a siglos de deforestación y pastoreo, hallándose bosques dignos de mención sólo en las regiones montañosas del Atlas Telliano y del Atlas del Sahara, compuestos sobre todo de pinos, cedros del Atlas y alcornoques.
La flora del Sahara se concentra principalmente en áreas con un cierto abastecimiento de agua. La escasa vegetación del país influye, especialmente en el sur, sobre la reducida cantidad de animales, siendo éstos especies sofisticadas adaptadas a la vida del desierto. Entre ellas se encuentran pequeñas cantidades de antílopes, liebres, gacelas, zorros del desierto, así como distintos tipos de reptiles y pequeños mamíferos como el jerbo (roedor). Entre las aves destacan buitres, gangas y diversas aves cantoras.
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